Para ir al inicio pincha mi nombre:

Irmina

Un granado rojo aurora

Resbalan de un granado rojo aurora
las horas de tantos muchos días,
las horas de tantas muchas noches.
Por lo liso del tronco sinuoso y grueso,
por lo ancho de las flacas ramas
—que son hilos— de ese árbol milagroso
van cayendo los minutos que le sobran.
¡Pobre de mí si se guarda los segundos
—rubíes de brillo sonrosado—
en las milgranas que aún le cuelgan!
error: El contenido está protegido