Loto, sereno loto, sagrado loto,
ardiente cuna del ardiente sol,
cuenco donde verterá su luz la luz,
eterno lecho del verano eterno.
Bien pudieras contener el alma
de quien con el alma te contempla,
esconder tú mi ser desabrigado,
guardar el pensamiento que te mira.
No contentará el amor mi amor,
sino el color que te convierte en flor:
tus rosadas velas navegando.
¿No tiene nombre la belleza?
¿No tiene nombre que la nombre?
No tiene más nombre que tu forma.
Loto, sereno loto, sagrado loto,
cuna ardiente del ardiente sol,
cuenco donde verterá su luz la luz,
eterno lecho del verano eterno.