Yo que en otro tiempo marchaba
con la lluvia bañando mi cogote,
con el viento volando mis doctrinas,
con el sol quemando mis sentidos.
Yo que en otro tiempo…
Yo…
¡Qué absurdo afán por recordar!
¡Qué estúpido lidiar entre recuerdos!
¡Qué griterío el de esos grajos
que traen a mi memoria lo negro del ayer!
Un minuto inicia otro minuto.
Un escalón a otro lleva.
¡Qué absurdo afán por recordar!